Los dientes de leche son muy importantes para la salud y el desarrollo adecuado de la salud dental de tus hijos. Son los primeros ocupantes de la boca y les «guardan el sitio» a los dientes permanentes, estableciendo el espacio que deben ocupar y procurando que estos crezcan con un espacio reservado. Sin embargo, una caída prematura de los dientes de leche puede generar un vacío que los demás dientes pueden aprovechar para moverse y dificultar la salida del diente permanente en el hueco que ha dejado el diente caído. Esta caída prematura puede ser debida a las enfermedades bucales más frecuentes en niños y es por ello que hay que tener clara la importancia que posee el cuidado dental a edades tempranas.

Las enfermedades bucales más frecuentes en niños

A continuación te mostramos una lista con las enfermedades bucales más comunes en niños y sus síntomas para que puedas identificarlas con rapidez:

Gingivitis:

No es muy grave pero puede llegar a serlo si no se trata adecuadamente. Una mala higiene bucal es el desencadenante de esta enfermedad que puede provocar molestias al masticar los alimentos y derivar en otros problemas fisiológicos, es por ello que se trata de una de las enfermedades más frecuentes en niños. Provoca sangrados e inflamación de las encías y pérdida de hueso alveolar que sostiene los dientes y que posibilita la caída prematura de los dientes.

Estomatitis:

Las enfermedades bucales más frecuentes en niños

Aunque aparezca con un nombre extraño, es muy común este tipo de enfermedad. Se presenta en forma de inflamación en la boca y provoca molestias y dolores que dificultan el habla, el comer y, si es grave, hasta dormir. Existen dos variantes, la más común es la aftosa. Esta se presenta en forma de pequeñas llagas o heridas. Las causas son muy variadas ya que puede aparecer a partir de una alergia, la fiebre, el estrés, una mala nutrición o un mal hábito de higiene bucal.

Herpangina:

Se trata de una infección muy habitual entre los niños con edades entre 3 y 10 años. Es causado por un virus de rápida transmisión llamado Coxsackie del grupo A. El principal síntoma son lesiones de color rojo que se convierten en ampollas y revientan provocando llagas o úlceras. Son muy dolorosas y difículta el ingerir comida y agua. También pueden provocar fatiga, fiebre y dolores de cabeza.

Candidiasis oral:

La candidiasis oral surge a través de la infección de un hongo en el interior de la boca. Estos hongos están presentes de forma normal en la boca, pero si se genera una cantidad mayor de estos puede surgir la enfermedad. Los bebés y niños tienen un mayor riesgo de padecerla ya que su sistema inmune no está del todo desarrollado. Se muestra en la boca como pequeños parches de color blanco o amarillo, con enrojecimiento e inflamación de la lengua, problemas para tragar y dolores.

Esperamos que esta información te sea de utilidad para prevenir posibles enfermedades bucales y os recordamos el importante papel que juega una buena higiene bucal en los más pequeños a la hora de evitar que pierdan su sonrisa.

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