Todos hacemos promesas en Nochevieja y Año Nuevo puede servir como un empuje para
mejorar tus hábitos bucodentales. Es el tiempo bueno para recordarte a ti mismo o a tus
pacientes que la salud dental es una gran parte de tu bienestar general.
Desde Dibujando Sonrisas Sanas os deseamos feliz y saludable Año Nuevo y os proponemos
unas resoluciones dentales para este Año Nuevo.
1. Mejorar los hábitos de cepillado
Todo el mundo cepilla los dientes pero a veces se puede saltar el cepillado de la noche por
estar cansados o no tener tiempo de controlar el cepillo de los niños por las mañanas
ocupadas de días escolares. Además, puede ser que tú y tus peques sigáis la rutina de
cepillarse de manera habitual pero no lo hacéis de manera correcta. Ha llegado el tiempo para
empezar a aprender a cepillarse bien y enseñar cómo hacerlo a tus niños y hacerlo por lo
menos dos veces al día.
2. La comida más saludable
No tengas miedo a empezar a elegir bien los productos que come tu familia. Parece difícil pero
solo hace falta empezar y ya te acostumbrarás rápido a comer más sano y destacar los
productos que contienen elementos dañosos para los dientes ya que vas a notar la diferencia
no sólo en tu sonrisa sino también en tu bienestar general.
3. Los correctores dentales
Si has estado pensando en correctores para tu crio o para ti, llega la hora de actuar. Cuanto
más lo atrases más difícil y caro será corregir el daño hecho. Hoy en día hay bastantes opciones
de correctores entre cuales podrás elegir uno que te vienen bien.
4. Las visitas al dentista
Si hasta ahora no pudiste buscar tiempo para las consultas anuales de dentista, tienes la
posibilidad de empezar ahora. Tú y tu niño merecéis tener la sonrisa saludable. Esto va a
ayudar a prevenir muchos problemas dentales y parar las enfermedades en la primera etapa.
5. ¡Sonríe!
Acuérdate que algunas enfermedades están causadas por tu estado mental. Trata de disminuir
en tu vida y en la vida de tu niño las factores que pueden causar ansiedad o estrés para evitar
problemas bucodentales como bruxismo. ¡Y sonríe!
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